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Beneficios de tener un TPV en hostelería

En el sector de la hostelería, donde la atención al cliente y la agilidad en el servicio son clave, contar con un TPV puede marcar la diferencia

Un TPV (Terminal de Punto de Venta) es una herramienta que permite gestionar pagos electrónicos y, en algunos casos, otros aspectos del negocio, como el inventario. En este artículo, te contamos los beneficios más destacados de tener un TPV en hostelería y cómo puede ayudarte a optimizar la operativa de tu negocio.

¿Por qué un TPV en hostelería?

Un TPV en hostelería es más que un simple dispositivo para cobrar con tarjeta. Es una solución tecnológica diseñada para facilitar la gestión de bares, restaurantes, cafeterías y cualquier negocio relacionado con la alimentación y la atención al público.

Además de procesar pagos con tarjeta o dispositivos contactless, algunos TPV modernos incluyen funcionalidades avanzadas como:

  • Gestión de propina: Ideal para cuadrar caja correctamente y facilitar que los trabajadores puedan obtener una propina.
  • Control de transacciones: revisa y gestiona los cobros realizados en tu negocio desde el propio terminal TPV.
  • División de cuentas: Perfecto para clientes que desean pagar de forma separada.

Beneficios de usar un TPV en hostelería

1. Mejora la experiencia del cliente

Un TPV te permite ofrecer formas de pago variadas, desde tarjetas hasta smartphones y relojes inteligentes. Esto es especialmente útil en un sector en el que la comodidad del cliente es una prioridad. Además, puedes agilizar el proceso de pago, evitando largas esperas al final de la comida o cena.

2. Gestión más eficiente del negocio

Con un TPV en hostelería, puedes centralizar la información de las ventas diarias y controlar los productos más vendidos. Todo esto te ayuda a tomar decisiones informadas para mejorar la rentabilidad.

3. Agiliza la toma de pedidos

Algunos TPV permiten integrar dispositivos como tablets para que los camareros tomen nota de los pedidos directamente desde la mesa. Esto reduce errores y asegura que los pedidos lleguen rápidamente a la cocina.

4. Seguridad en los pagos

El uso de un TPV disminuye la cantidad de efectivo en caja, lo que reduce riesgos de robos o extravíos. Además, las transacciones electrónicas cuentan con medidas de seguridad avanzadas, como la autenticación por PIN o el pago sin contacto.

5. Optimización del tiempo del personal

El personal puede dedicar más tiempo a atender a los clientes y menos a calcular los cobros en efectivo. Además se evita entrar en contacto directo con monedas y billetes, limitando una posible contaminación de alimentos.

6. Facilidad para gestionar promociones y descuentos

Si tienes promociones especiales, menús del día o descuentos por fidelización, un TPV puede ayudarte a aplicarlos de manera automática, evitando errores en el cálculo.

Ejemplos de uso en hostelería

  • Restaurantes: Los camareros pueden tomar pedidos desde tablets conectadas al TPV y enviarlos directamente a la cocina. Al final, los clientes pueden pagar con distintos métodos.
  • Bares y cafeterías: Los pagos rápidos con contactless agilizan el servicio en horas punta.
  • Negocios de comida para llevar: Un TPV facilita los cobros con tarjeta, incluso en servicios de entrega a domicilio.
  • Hoteles con restaurante: Integrar el TPV con el sistema de reservas permite un control unificado del negocio.

Recomendaciones para elegir un TPV en hostelería

  • Busca uno adaptado a tus necesidades: Si gestionas un restaurante, prioriza funciones como la gestión de propinas o la toma de pedidos.
  • Opta por soluciones integrales: Algunos TPV ofrecen herramientas para analizar datos de ventas, permitiendo un mejor control sobre el negocio.
  • Asegúrate de la compatibilidad con múltiples métodos de pago: Aceptar tarjetas, contactless y pagos móviles, entre otras opciones, es imprescindible hoy en día.

Contar con un TPV en hostelería no sólo facilita los pagos, sino que también mejora la eficiencia de tu negocio y la experiencia de tus clientes. Sus beneficios abarcan todo el proceso de atención. Si buscas optimizar tu restaurante, bar, cafetería o cualquier modelo de negocio de restauración, un TPV es una inversión estratégica hacia el éxito.